Lo gracioso gracioso es

Leo que el comediante Steve Martin se ha disculpado -- más de una vez -- por un comentario en broma que ha sido tomado como racista. Es el más reciente incidente en que una figura pública se tiene que disculpar por un comentario antisemita, machista, racista, sexista y una interminable lista de «istas». Vivimos en un mundo en el que casi cualquier cosa que se diga ofende a alguien, y entonces se exigen disculpas y se amenaza con represalias de todo tipo. Las personas que han sufrido un discrimen se muestran muy sensibles a la más mínima referencia respecto a su condición. Su mundo ideal es uno en que nadie hace bromas, pues es prácticamente imposible el humor que no esté basado en alguna condición emocional, étnica, física, mental, religiosa y un larguísimo etcétera. Tan «válida» es una como las otras; por lo tanto, o nos ofendemos todos y no bromeamos con nada, o no nos ofendemos por nada y nos echamos a reír, si el chiste es bueno.

Voto por lo segundo.

Comentarios

Entradas populares