Unas notas discordantes

No estoy tan seguro de que sea buena idea obligar a los padres a buscar las notas de sus hijos en la escuela. Porque, francamente, ¿cuántos padres están aptos para juzgar el asunto? La realidad es que el nivel intelectual de la gente es tan bajo que dudo mucho que puedan dialogar de manera inteligente con los maestros sobre el aprovechamiento académico de sus hijos. ¿Qué puede aportar en este contexto alguien que dice «íbanos», cree que Chicago es un estado de Estados Unidos, o no sabe calcular un 20% de descuento?

Lo que puede pasar es que, confrontados con las «D» y «F» de sus hijos, les caigan a «burrunazos» cuando lleguen a la casa. Bastante violencia doméstica tenemos en el país, para añadirle este otro renglón. Como dijo el escritor italiano Giacomo Leopardi: «La felicidad está en la ignorancia de la verdad».

Seamos felices.

Comentarios

Entradas populares