Una actitud «perra»

No me sorprende lo ocurrido a la señora que fue objeto de maltrato en Walgreens de Los Paseos, pues la empresa tiene antecedentes de autoritarismo e intolerancia. Recuerdo hace muchos años que una amiga me contó que una amiga suya trabajaba en la sucursal de Miramar en un ambiente extremadamente rígido, donde se sentía intimidada y nerviosa por las normas de control férreo de la empresa sobre los empleados.

Parece, pues, que la «cultura corporativa» lleva a los supervisores a ser exageradamente estrictos en la aplicación de las normas - de ordinario, no se permiten animales en una tienda - y son incapaces de examinar los casos especiales, como éste de un perro con unas funciones particulares en beneficio de la salud de su dueña. Irónicamente, este desatino ha ocurrido, precisamente, en una farmacia, donde, presumiblemente, deberían estar al tanto de y ser más sensibles a los asuntos terapéuticos.

Comentarios

Entradas populares