Historia de dos Muros
Hace casi veinte años, el mundo capitalista "celebró" la caída del Muro de Berlín, el comunismo y el socialismo. Los adinerados del mundo se "jartaron" hablando del triunfo del sistema que había hecho posible sus fortunas bien y mal - casi siempre mal - habidas. La era de Reagan, Thatcher y Friedman tenía su finest hour; la avaricia organizada se paseaba triunfante por el globo terráqueo.
Hoy se cae en cantos otro Muro: Wall Street, y aquéllos que proclamaron la superioridad de su sistema, corren despavoridos a que ese Estado cuyas ayudas a los ancianos, enfermos y pobres en general han criticado tan acremente les brinde una ayuda que ha sido caracterizada muy acertadamente como corporate welfare.
Si bien la economía centralmente planificada y controlada con mano de hierro terminó fracasando, el "capitalismo salvaje" también ha sido desastroso. Al final, tanto el Muro de Berlín como Wall Street resultaron ser "muros de lamentos."
Hoy se cae en cantos otro Muro: Wall Street, y aquéllos que proclamaron la superioridad de su sistema, corren despavoridos a que ese Estado cuyas ayudas a los ancianos, enfermos y pobres en general han criticado tan acremente les brinde una ayuda que ha sido caracterizada muy acertadamente como corporate welfare.
Si bien la economía centralmente planificada y controlada con mano de hierro terminó fracasando, el "capitalismo salvaje" también ha sido desastroso. Al final, tanto el Muro de Berlín como Wall Street resultaron ser "muros de lamentos."
Comentarios
Ahora rescatan a Wall Street, pero nunca rescataron a los haitianos que salieron de su país en 1991, luego del primer golpe de estado contra Aristide. Al contrario, Bush padre le ordenó al "Coast Guard" que, en lugar de interceptar sus botes y llevarlos a Guantánamo, los devolvieran a Haití, donde los esperaban los matones de Raoul Cedras.
La lista es larga; los abusos, incontables.